Sony lanzó hace unos días la comercialización de un nuevo modelo para su PS5. Por supuesto, esta es solo una pequeña revisión sin grandes cambios para los jugadores. Pero eso no impidió que surgiera una polémica...
Así, algunos youtubers y otros internautas en las redes sociales habían señalado la presencia de un disipador de calor más pequeño, provocando así un mayor calentamiento.
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Mucho ruido…
Para aclarar todo esto, el canal de YouTube Digital Foundry hizo una revisión en profundidad de esta “nueva” PS5. A fines de agosto, el camarógrafo Austin Evans afirmó que esta copia era mucho peor que la que se lanzó en noviembre. Su principal crítica se dirigió en particular al sistema de refrigeración más estrecho de la máquina con la referencia CFI-1100. El principal interesado indicó que la PS5 emitía 3°C más que el modelo comercializado en el lanzamiento.
Pero, si hemos de creer a los especialistas de Digital Foundry, el resultado dista mucho de ser alarmante… ¡Todo lo contrario! Porque al final, las diferencias entre estas dos PS5 parecen anecdóticas. Sí, el disipador es más pequeño, pero Sony ha hecho otros ajustes, como la placa base.
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…¡por poco!
Así, Digital Foundry explica que se han mejorado significativamente las temperaturas en los reguladores de voltaje pero también en la memoria. En algunos casos el calor puede ser más intenso (como en el procesador) y en otros menos. Sin embargo, actualmente no hay evidencia de que esto pueda afectar negativamente el rendimiento de la PS5.
Ciertamente ha habido algún tipo de simplificación del sistema de enfriamiento con temperaturas más altas en algunos lugares, pero eso no lo convierte en una versión "peor o mejor" que la que se vendió en el lanzamiento. Para concluir, la experiencia de los jugadores no se verá afectada en absoluto para bien o para mal. En resumen, ¡nada que informar! Los angloparlantes pueden disfrutar del análisis completo de Digital Foundry a través del siguiente video.
