A la espera de las principales funciones nuevas que llegarán en las próximas semanas, el PS5 recibe una actualización menor que realmente no debería marcar los ánimos.
Lanzada en noviembre de 2020, la consola de Sony Interactive Entertainment aún no se ha tomado el tiempo de ofrecer nuevos elementos que mejorarían drásticamente la experiencia del usuario. En abril pasado, todavía se implementó una primera actualización bastante importante. Trajo en particular la posibilidad de almacenar juegos en un disco duro externo. En cuanto al parche del mes pasado, solucionó varios problemas, como el ícono de la batería DualSense que parpadeaba constantemente.
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Del gran clásico
Así, la versión de actualización 21.01-03.21.00 llegó este jueves 8 de julio de 2021. Tiene exactamente 902,4 MB y se contenta con mejorar el rendimiento del sistema. Nada más… o al menos en apariencia. Porque en varias ocasiones, la PS5 recibió parches que contenían correcciones no especificadas por Sony. Por lo tanto, esta actualización puede esconder algunas sorpresas.
Además, no olvidemos que la marca japonesa ha abierto el registro para que los jugadores puedan probar la beta de la próxima gran actualización que aterrizará en PlayStation 5. Entra en la web de PlayStation para intentar participar.
