El muy misterioso Sable sale en un puñado de días, el 23 de septiembre precisamente en medios PC y Xbox. Sus múltiples presentaciones han destacado a menudo su escenario desértico y su dirección artística atípica y original. Hoy, es un vistazo rápido a su tradición que nos ofrecen los desarrolladores de Shedworks.
Aunque las tierras de Sable parecen muy escasamente pobladas, los habitantes del mundo de Midden tienen sus propios hábitos y costumbres que dan una dimensión cultural al viaje de Sable.
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Una aventura más cultural de lo que parece
Al igual que la gente de Facade en NieR: Replicant, los habitantes del mundo de fantasía de Sable usan máscaras. Este aspecto folclórico, que puede parecer trivial, le da al título una perspectiva cultural ya que esta tradición está anclada en la narración del juego y en la búsqueda del joven aventurero que encarnamos.
Como rito de paso a la edad adulta, los niños inicialmente usan una máscara neutra que personalizan, a medida que crecen, para expresar su individualidad y reflejar quiénes son en su interior. Esta evolución les lleva, al final, a emprender un viaje espiritual por el desierto.
Lo hemos entendido bien: explorar el mundo de Sable con las manos desnudas, gracias a la escalada, o a toda velocidad, gracias a la hoverbike, es imprescindible, porque constituye una etapa imprescindible en la tradición cultural de los habitantes de Midden. El viaje de nuestro héroe es, en parte, facilitado por un artefacto, la "Piedra deslizante", que le permite, dentro de una burbuja, flotar en el aire.
Gracias a este poder, podrás explorar los rincones más pequeños del mundo y hacerte con, entre otras cosas, insignias que podrás intercambiar para hacer nuevas máscaras con un estilo único. También parecería que el juego te lleva a tomar una decisión final sobre tu atuendo final, que estará influenciado por los encuentros realizados y los lugares explorados durante tu viaje iniciático.
